Blogia

BALAS PERDIDAS

www.17-s.info

www.17-s.info

www.17-s.info
¿Hipotecados hasta las cejas?
¿No podeis evitar reír cínicamente cuando oís que vivimos en la Sociedad de la Democracia y la Libertad?

El famoso Robin Hood moderno, el desfalcador de nosécuantos millones a los bancos tiene una página web que quizá os interese...

NO A LAS 65 HORAS NI LOCOS

NO A LAS 65 HORAS NI LOCOS

Por favor, si estáis en contra de la futura jornada laboral de 65 horas, entrad en este link y votad. No garantizo nada, todos sabemos que la voz popular cada día vale menos, pero si hay algo que no queremos, mejor gritar aunque no nos oigan que quedarse callado (almenos te quedas descansao)...http://no65h.com/

foto: 1984

JO DORMINT, REPOSANT, SUPURANT...

JO DORMINT, REPOSANT, SUPURANT...

El otro artistazo al que le debo la vida casi casi, es Albert Pla. Durante mucho tiempo había escuchado unicamente su disco "Ho Sento Molt", pero cada una de sus letras es un poema, y acompañado de muy buena música. Pude ir a su directo en Cambrils este verano y...mi consejo es que vayais a verlo. No sé si es que ha dejado las drogas recientemente o que coño le pasa, pero tenía una energia en el escenario...acollonant.

Mención aparte al guitarrista flamenco que lo acompañó. Se marcó un solo de 10 o 15 minutos, y hay que decir que cuando después volvió Albert Pla, me sabia a poco...que guitarra joder!!! Quiero el nombre de ese tio!!!

 

L’HOME QUE ENS ROBA LES NÓVIES

sols hi ha un home que recordin les iaies les iaies més velles
que recordin com se’ls amorrava a les calces quan elles eren joves
sols hi ha un home que recordin les iaies
que recordin com desperta les nenes quan deixen de ser nenes
perquè ell és l’home amb qui somnien les dones quan somnien amb homes
i ell és l’home que mulla les dones quan es consolen soles
i ell és l’home amb qui sospiren les dones que els homes no poden
i ell és l’home que conforta les dones
i ell és l’home que consola les dones
i ell és l’home amb qui es masturben les noies
i ell és l’home que ens roba les nòvies
i ell és l’home que ens roba les nòvies
i ell és l’home que espia les dones i fa sol i és diumenge
i ell és l’home que miracle la hòstia les fa seves de pressa
i ell és l’home que acompanya les dones de braçet a l’església
i ell és l’home que confessa les dones
i ell és l’home que pastura les dones
el cabró que se’ns carda les cabres
i ell és l’home que ens roba les nòvies
i ell és l’home que ens roba les nòvies

ell és el goril.la que sorgeix de les ombres i ens reclama les verges
ell és el monstre que s’emporta les joves a les nits de turmenta
la criatura que pretenen les dones per tot menys per dur al ventre
i ell és l’home que se’n riu de nosaltres
l’alimanya que s’oculta a les coves
i és la bèstia que emborratxa les dones
i ell és l’home que ens roba les nòvies
i ell és l’home que ens roba les nòvies

i ell és l’home el gran home el mil homes que obsessiona les dones
o potser és l’home que es pensen els homes que obssesiona les dones
l’obsessió que turmenta qualsevol relació entre un home i les dones
i ell és l’home que no veuen els homes
i ell és l’home que sols saben les dones
el fantasma que enfosqueix a les dones
la cadena que carreguen els homes
és la pena que hi ha entre homes i dones
i ell és l’home que ens roba les nòvies
i ell és l’home que ens roba les nòvies.

 

Escucharla. No es un consejo, es una amenaza

IT´S BEEN SO LONG...

IT´S BEEN SO LONG...

Hacía mucho tiempo que les debía una entrada, una foto, una canción, a dos músicos que por su forma de hacer me han llenado de buenos momentos y bla, bla, bla, todas esas cursiladas que se suelen decir.

El primero (aunque el más reciente) es Micah P. Hinson. Con un directo muy cañero y desgarrado, a la altura de sus discos, pese a tener que compartir con cien personas la música que suelo escuchar solo en mi cuarto cuando no quiero ver a nadie...¡Tio, eres la polla!

THE LEADING GUY

"Words would’t come stumbled all deaf and dumb
As the crowd awaits his great escape
And his fingers wouldn’t move nervous back and blue
Just an eye game, game away now
And he had moved

And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care
And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care

So the crowd spit him out
And they shot him through the skies
They crucified rock and rolls worst leading guy

And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care
And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care

And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care
And he had moved on to god knows where
And he had moved on none of us care"

INSTANTES DESPUÉS

INSTANTES DESPUÉS

Es lunes. Después de despedir a Elise, me siento muy solo, aunque también muy libre (si es que eso tiene algo de positivo).

Instantes después, mientras doy vueltas por Plaza Cataluña, me manda un mensaje: "tqmmmm". Las ganas de llamarla son irresistibles. Quiero decirle lo mismo. No hay cobertura. Lo escribo en mensaje, con los ojos húmedos y sintiendo la ausencia de la mitad de mis órganos vitales. Pero antes de enviarlo me llama ella para decirme que ya me echa de menos. Yo también, joder. Le digo que la quiero con gotas que no llegan a caer de mis ojos. Y no es un te quiero seguro y firme, no. Es un te quiero débil como una hoja vieja y mojada. Pisoteada mil veces. Se rompe fácilmente, y no se despega del suelo por mucho viento que sople. Hay cosas que no se curan...Me había jurado no decirlo más, pero lo he hecho.

Luego doy vueltas y más vueltas, sin rumbo. Me siento a comer el bocata con desesperación, distrayendo mis sentidos, que se sienten abandonados. Pero me rodea un grupo de treinta estudiantes franceses. Instintos asesinos aumentando...

Con necesidad de ver a alguien, de hablar de algo. Acabo en una plaza de mi antiguo barrio. El centro es muy anónimo y agobiante. Las palomas rodean mi banco. Hay un macho palomo en celo, que se encrespa y hace sonido para llamar la atención de una hembra. Pega pequeños esprints hacia ella, como si la fuera a envestir. La hembra pasa de él, pero él no desiste, no puede aunque quiera. Ese instinto animal me mosquea bastante. Me identifico bastante con el palomo, cosa nada agradable. Así que pego un esprint hasta el quiosco, para comprarme la misma revista que le he comprado a Elise para su viaje en tren(...). Es una revista de humor, que conseguiría distraer a cualquiera. Necesito sentirme menos palomo.

Pero en el quiosco me fijo en la portada de una revista de ciencia, en la que aparece el torso desnudo y el paquetorro de un maromo que yo jamás tendré: "La crisis de los 35"..."Los riesgos médicos del hombre por no tener descendenia"...

Joder. Quiero llamar a Elise y prevenir mi crisis de los 35. A mis 22 años...

UN DÍA COMO HOY

UN DÍA COMO HOY

Mi habitación. Fuera esta lloviendo, justo cuando se va el sol. Hay una luz extraña. Naranja y azulada al mismo tiempo. Y te hecho de menos. No es que sea algo importante, ni algo nuevo. Estoy más bien cansado de este sentimiento. Es solo una pequeña mosca cojonera, zumbándome siempre al oído. Que negro se ve todo cuando no estoy contigo. Y qué distinto a cuando estamos juntos.

EL MURO II

EL MURO II

Y la princesa se plantó frente al muro, e hizo salir al ogro de su encierro...Los dos se quedaron ahí, pequeños pero tozudos, esperando y esperando, indiferentes a la fría e inmensa muralla...esperando juntos hasta que cayera la última piedra de miedo y orgullo.

WOOD MORNING (HONEY)


Millas de distancia.

Tu cuerpo destilando calidez,

agitándose adormilado de excitación.

Cariño perezoso y medio inconsciente,

Palpa todo mi cuerpo

y reclama el mejor de los despertares.

 

Movimientos torpes pero seguros,

Bocas pastosas y mentes sin pensamientos,

debatiéndonos entre seguir durmiendo

o seguir soñando despiertos.

 

La negrura de la noche se vuelve mañana roja

La oscuridad de los miedos se esconde bajo la cama.

Que suerte que ya no haya palabras,

Que suerte que ya no haya silencios.

Solo tacto, olfato, gusto…

 

Solo tenues siluetas, cuerpos débiles y ansiosos,

que se agarran y se unen,

Se lamen y se empapan…

y se aprietan,

se abrazan,

se besan.

Excitación que crece, pero…

¡Qué excitación más dulce!

Salvaje

e inocente.

 

No hay dobles sentidos.

No hablamos nada

porque ahora…

no callamos nada.

 

Lo único que queda es redondeado,

¡Tan tierno y tan ardiente!

 

Entre nuestros cuerpos oprimimos las dudas

Y con nuestros besos comemos rencores.

Devoramos pasado, presente,

y sobretodo futuro.

 

“Pensando con la polla…”

¡Bienvenida a bordo!

Que tome ella el mando,

que tome ella el control que yo me voy.

Mi cabeza es tan cansina como peligrosa…

En ella guardo todas las horas

que no he estado contigo.

Todas las vigilias dormidas.

Horas de sueño sin soñar en nada.

NADA NUEVO

 

No digo nada nuevo al decir que cada nueva persona que quieres, la quieres de una forma más triste.

Cada persona que has querido se lleva una parte de tu amor y tu ilusión.

Cada nuevo amor nos recuerda el paso imparable del tiempo.

Cada nuevo amor nos recuerda la futilidad de todo.

Cada nueva relación nos llama a la eternidad, a un estado atemporal y apacible.

Pero tarde o temprano el amor se acaba, o se acaban las personas que aman.

No digo nada nuevo.

Es lo bello y lo triste.

Dos personas que deciden envíar a la mierda al mundo y sus prisas.

Exclaman: "¡A la mierda cada una de las chorradas efímeras con las que vivimos! ¡A tomar por culo nuestros mismos cuerpos, el amor sobrevivirá a eso y más!"

Qué bonito. Dos almas unidas en la lucha contra el Tiempo, en la lucha contra Todo el Sinsentido.

Dos almas unidas en la lucha contra Ellas Mismas.

Una lucha realmente inútil, pero una lucha al fin y al cabo.

Como todos los valientes, inconscientes.

Como todos los inconscientes, felices. No digo nada nuevo.

14-10-07

 

El día de mi vuelta estaba en la estación de tren,

fumando como siempre un cigarrillo.

Llegó una pareja joven en coche, conducía ella.

Bajaron y sacaron una bolsa del maletero,

se dieron un beso y él se marcho,

mientras se despedían con la mano y ella subía de nuevo a su coche.

Él se giró una última vez, pero ella ya estaba maniobrando para salir

y no le vió.

Ahora tenían todo el tiempo del mundo para olvidarse el uno al otro.

Eso me hizó dar cuenta de lo vulgar de estas relaciones,

la mía incluida.

Lo que empieza como un acto loco y valiente de amor,

o atracción al menos,

acaba en un polvo de fin de semana...

Pero yo aún no puedo olvidar su cabeza en mi pecho.

Aún... 

IMPRESIÓN DE NADA

 

De vuelta de Toulouse, en la estación de LaTour de Carol. Con un pie en Francia y otro en España, enmedio de los Pirineos, la soledad era más grande que cualquier montaña, y más fría. Otros viajeros esperaban como yo el autobús.

Es muy curioso observar a esa gente como tú, todos parecen sospechosos o descorazonados, o ambas cosas. Una madame elegantemente vestida, que cubre su alma con gafas de sol, más fría que un témpano, quizá yendo o volviendo de su último intento de amar sin tener que sufrir más. Dos simpáticas cincuentonas francesas, charlatanas como cotorras, seguro expertas cocineras y adictas a la prensa rosa. Ilusionadas porque creen estar escapando de ellas mismas. Una pareja de negros, africanos o franceses, abrigados hasta la frente sin hablar el uno con el otro, con destino inimaginable, aunque seguro que no mejor que del que escapan. Una guapa joven, yendo o volviendo de un amor fugaz, perdida, y quizá más triste que en la ida. O quizá feliz, pero seguro que no libre. Un trabajador solitario comiendo un bocata a la luz de la mañana, que parece pasar más tiempo ahí que en su casa. Sin mirar a nadie, de vuelta de todo. Aparece un coche con dos tipos cuarentones, vestidos con botas de piel y chaquetas de cuero, uno de ellos con gafas de sol, y las cejas en un gesto inocente y culpable a la vez. Caminan como cowboys y juzgan a todo el mundo. Entran en la estación de esta guisa y salen al cabo de dos minutos, de la misma forma que llegaron. O traficantes o secretas pienso, pero eso es lo divertido, que en un sitio como este uno no sabe nada. Gente anónima con vidas desconocidas. Quizá son las abuelitas las traficantes, o el obrero zampa-bocatas, o yo mismo sin saberlo...Quizá la chica joven ha viajado por estudios y no por placer. A lo mejor yo soy el único fugitivo aquí.

Lo triste de verdad es que hoy en día muchos podemos gastar nuestro dinero y tiempo en sentirnos libres, yendo de aquí para allá. ¡Qué espejismo más bien creado, pues todos tenemos que volver a nuestras celdas! Corremos como galgos huyendo del hastío y persiguiendo al conejo blanco del placer inmediato, pero damos vueltas y vueltas volviendo al mismo punto, cansados pero infatigables, aún sabiendo que el conejo es de cartón. ¡Cuánta vida para tanta muerte! En eso hay que descubrirse ante el prestidigitador, si existe, pues el equilibrio es tan perfecto como inútil.

EL MURO

 

No puedo quejarme.

Pudiendo haberme evitado,

viniste,

y no sólo eso.

Pudiendo haberme torturado,

me cuidaste.

Me diste más de lo que tenía derecho a pedir,

e incluso más, con ilusión, con sorpresa,

con voracidad de vida.

Más, mucho más de lo que se puede soñar.

¿Lo hiciste por amor,

por curiosidad,

por mero capricho juvenil?

¿Por ti? ¿Por mí?

Ese es el único drama de esta historia, supongo.

Esa barrera realmente infranqueable

entre lo que sientes tú,

y lo que pienso yo.

¿O no?

EL MENDIGO Y LA HAMBURGUESA

 

Estuve mucho tiempo sin saber de ella. Digamos que ya me habían saturado sus charlas sobre todas las cosas maravillosas que tenía que hacer y sobre todas las pollas maravillosas que había conocido. Esto suena duro, pero no lo digo por reducirla a la categoría de guarra. Simplemente no entiendo como podía sentirse tan realizada saltando de cama en cama. Era una vieja amiga y algo más, una de las primeras Mujeres con mayúsculas que había conocido. Compartimos muchas cosas (no tantas como yo hubiera querido habréis deducido ya). Fué una buena confesora y hubiera sido una mejor amante. Nunca pensé por eso que el poder de la feminidad que latía en ella con tanta fuerza acabaría por poseerla. Ahora era una especie de envoltorio sin regalo, una muñeca hinchable que se sentía feliz de ser tan útil...Era como si sus hormonas hubieran acabado por devorar su cerebro...

Eso no significa que para mí dejara de ser atrayente. Mucha hambre he pasado como para haber desperdiciado una ración de ella. Pero a cada nuevo encuentro ella se iba transformando lentamente ante mis ojos, y pasó de ser cocina de vanguardia, de sabores y texturas inesperados, para acabar como "Mc Menú". Te lo comes porque es barato, rápido y está bueno, pero aburre, y sabes que no te estás haciendo un favor precisamente.

Pero si ella se transformaba en un McDonalds yo me transformaba en un sintecho, y los mendigos zarrapastrosos no entran en los puestos de comida rápida. Así que ahí estaba yo, pegado a la vitrina, sin catarla, odiándola en secreto a ella y a todos los que se ponían las botas a su costa.

Pero al llegar el verano, ya no estaba dispuesto a babear más el cristal que guardaba su sexo. Aquél verano supongo que no lo tiré a la basura como tantos otros. Quizá no hice grandes cosas, ni viajé mucho, ni me corrí juergas de ésas de las que te tienen que recoger con escobilla al día siguiente. Ni tan siquiera escribí nada que mereciera la pena, ni trabajé en grandes proyectos que me ilusionaran. De hecho, me dediqué a hacer aquello que siempre he odiado: vivir cada día como si no fuera conmigo. Simplemente estar, sin aspirar, sin sufrir, dispuesto a gastar todas las horas del día y la noche en evitar mirar dentro de mí. Pero así escapé de los monstruos más grandes y feos que uno puede encontrarse: depresión, desmotivación, autodestrucción, vacío, soledad...

Rompí lo que tuviera que ver con mi rutinaria vida del último año, y eso incluía renunciar a una buena amiga, pero también a un desgaste constante de mi autoestima. Conseguí darme cuenta que era más fácil (para un paria sin techo ni cueva com yo) encontrar de casualidad un buen manjar entre toda la basura de las calles, que intentar entrar en la fortaleza inexpugnable de su negocio entrepiernal. Sabiendo además que aunque lo consiguiera no me sentiría satisfecho y estaría otra vez vagabundeando en busca del verdadero plato estrella. El plato estrella que buscamos todos supongo, y que es posible que no encontremos...

Así que después de escupir en el mostrador y de pronunciar algun que otro improperio, me di la vuelta, me cargué los hombros y le dije adiós a parte de mi pasado, quizá para siempre. Me sentía ligero, y mis glándulas salivales se encendían ante lo que podía depararme el futuro. Entonces se abrió la puerta detrás de mí y con sus ojos llenos de conocimiento terrenal me hizo un gesto para entrar y me ofreció un BigMac...yo seguí caminando mientras el estómago me ardía de hambre.

 

 

OLD CITY

 

Aquí estamos otra vez, vieja ciudad,

como dos antiguos amigos,

contentos de verse, pero silenciosos,

cansados de mil batallas.

Tus visitantes se hunden en el pantano oscuro de las noches,

como los cimientos de casas y calles.

Tu belleza no oculta tu degradación,

como tus pastelosos cielos no ocultan tus turbias aguas.

Como tus azules días no esconden tus noches rojas.

Eres la puta que sonríe a los clientes porque sabe que le conviene,

pero te ví llorar detrás de la cortina...

Y te ví mendigar un par de gramos de autenticidad

en las junglas de humo de ojos vidriosos y desperanzados...

Sigue pedaleando amiga, haz sonar el timbre para abrirte camino

aunque sea el camino hacia el fondo del cenagal...

Ahí nos volveremos a encontrar,

y podremos contarnos lo que no nos dijimos jamás.

FÁBULA DE AMOR VERANIEGO

FÁBULA DE  AMOR VERANIEGO

Era mi primer dia de playa después de un año de hibernación. Mi primera visita al mercado de la carne tostada y macerada en crema solar. Mis ojos estaban abiertos como platos de restaurante vanguardista, mientras pensaba para mí "joder, así que esto era lo que escondía el verano...¿por que coño nadie me lo ha explicado antes?".

Supongo que mi mente rozaba en esos momentos la temperatura de fusión, porque necesitaba entrar al agua cada dos minutos y criogenizar mis hormonas radioactivas e inestables. Sin duda sentía una despreocupada alegría y excitación que Einstein ya definió con eso de E=mc2. La masa (m) de los cuerpos femeninos por mi aceleración (c) hormonal (elevada al cuadrado al tener dos huevos), daba como resultado una E mayúscula de Energía, o de Erección, por eso de que ni se crea ni se destruye, solo se transforma...

Yendo al grano, diré que me sentía bastante feliz y realizado, rodeado de sol, mar, sexos y cervezas, junto a dos amigos, Gerardo y Marcos, de mentes tan calenturientas como la mía, aunque de testículos menos libres, ya que los dos estaban más o menos compremetidos.

Estuve nadando con Marcos un buen rato, sorprendido al descubrir que tenía un cuerpo, y que no solo servía para sostener y transportar mi cerebro, sino que podía nadar, jugar y hacer otras actividades. No quise abusar, así que cuando me sentí algo cansado le dije a Marcos:

-Salgo fuera, tío.

-¿Qué dices? Espérate cinco minutos que ahora vienen buenas olas.

-Que va tio, el deporte es malo para el tabaco. Yo me salgo.

-Ok, vamos- dijo Marcos refunfuñando.

Cerca de la orilla había una chica joven, vestida de forma extraña. Llevaba unos calzoncillos masculinos de color rojo, enrollados por la goma para que no quedaran demasiado largos, y que se le agarraban a su firme culo y su avispada cadera por el milagroso efecto de la humedad. Arriba una especie de top o sostén blanco que traslucía levemente unos pequeños pezones algo frioleros. Yo no llevaba las gafas puestas, así que mientras me iba acercando debía poner cara de estreñimiento. Quería verle bien la cara y para eso tenía que acercarme peligrosamente.

Y sin duda su cara era lo mejor y no desmerecía su cuerpo, ni al revés. De piel blanca, ojos claros y multicolores, una melena rubio-rojiza, cara algo pecosa, nariz chiquitita y labios rojos y gruesos enmarcando unos dientes ordenados y en perfecta formación, ella notó perfectamente como la miraba, y respondió con una sonrisa (supongo que debía tener una cara de gilipollas hipermetrope digna de exposición). Su postura además no denotaba suficiencia, era una cosita pequeña y tímida, sola enmedio de la playa. Parecía como si yo fuera la primera persona que la miraba como la preciosa mujer que era. Se sonrojó mientras yo pasaba por su lado y sostenía la mirada. Marcos hablaba conmigo mientras:

-Tío eres un rallado, mira que olas! ¿Qué ganas hay de tirarse en la toalla a no hacer nada?

Yo ni tan siquiera podía pensar, lo único que hice fué pararme y girarme para verla una vez más, era como si no pudiera moverme de ahí. Y en efecto, ella también echó una última mirada. Miré de nuevo hacia la orilla y ví a Marcos alejarse refunfuñando, ignorante del pecado embutido en calzoncillos masculinos, y de la condena de su amigo. Si me hubiera quedado ahí un segundo más, pensando que hacer, me hubiera ido con Marcos.

Pero esa vez no pensé, gracias a Dios. Di la vuelta, víctima ya de su campo gravitatorio, y empecé a rodearla. Me extraña no haberme quedado ciego después de ver aquel culo, aquella cintura que podía ser rodeada con un solo brazo. Cuando estaba a su altura ella se giró hacía mí sabiendo que era yo antes siquiera de mover el cuello. No dejaba de sonreír nerviosa, con la cabeza ligeramente agachada, pudorosa y excitada al mismo tiempo, pasando su mano suavemente por la superficie del agua, mientras sus ojos me miraban a través de su pelo enmarañado. Yo hacía tiempo que estaba cerebralmente muerto, y en mi boca solo cabía un O de sobrecogimiento, y en mi cuerpo solo la posibilidad de orbitar alrededor suyo en vuelo rasante. Los dos nos mirábamos no ya a los ojos, sino al nervio óptico, a la opacidad de nuestro pensamientos que por primera vez eran transparentes, claros y sin engaños. Tuvo que ser ella creo, ya que yo había olvidado como juntar unas letras con otras, la que dijo:

-Hi...

-Hi!- respondí - What´s your name?

-Elise- dijo mientras los dos nos juntamos a menos de un palmo.

-You are so fucking beautiful- Dije yo con ese inglés genuinamente español. Y no lo dije para ligármela, lo dije porque no podía pensar en otra cosa.

-Thanks! - dijo ella, su piel blanca y francesa era ahora del color de los tomates de mar- You are so beauty too!

Estábamos ya caminando los dos juntos hacía la orilla y, lo dijera de verdad o tán solo para corresponder al cumplido, es lo más bonito que me ha dicho una mujer, o al menos la interpretación más creíble. Y sobretodo ha sido la primer vez que oigo hablar y actuar claro al sexo femenino sin volverse algo realmente triste y frío. Pero todo esto es supongo porque ha sido la primer vez que no he sentido estar haciendo el gilipollas...

 

LA NOCHE Y EL DIA (AMSTERDAM-2)

 

He vuelto a la ciudad del lodo. De nuevo el sol se alternaba con las nubes, y la felicidad con su opuesto. Aunque esta vez el calor era espantoso, sofocante, el azul era pálido, y las noches tenebrosas. Esta vez quería mearme en las obras de Vincent "una oreja" y de tantos otros. Que absoluta falta de sentido.

Alguien debería ir a pintar la verdadera Amsterdam. Alguien debería plasmar el cuento de hadas que se le explica al turista cada vez que va. Que venga alguien a mostrarnos a los colgados de los coffeshops, a los negratas vendiendo crack en calles tan oscuras que más que verlos te chocas con ellos. Que alguien hable de las putas. Ríos de hombres de ojos saltones, mareas de morbo y soledad entre calles rojas, pero no de pasión, solo de neón. Calles rojas de crueldad, de violencia submarina. Que alguien encienda la luz en la noche de Amsterdam, donde cada día es Todos los Santos y cada noche Halloween...

Y cada turista que llega destruye un poco más su belleza con su dinero. Una ciudad enterrada entre el lujo y la ruina. ¿Cuántos años podrán aguantar sus viejos edificios a tantos cuerpos cebados por el aburrimiento? Que rebienten los diques y desborden los canales, para mostrarnos que hay en el fondo y para limpiar sus calles. Amsterdam se mira a si misma colocada de dinero, de drogas, de lujuria, de banalidad. Pero cuando llega la resaca del día después, tan solo de vez en cuando y de reojo, Amsterdam se mira con pena y melancolía, soñando con la ciudad que le hubiera gustado ser. En eso se parece a mí.

LA CHINA

Jaime era la típica persona que creía que el estado de normalidad mental y física eran una especie de castigo divino. Beber, Fumar, y drogarse en general eran su meta y su razón de ser, aparte de muchos otros vicios que no cabrían aquí. Lo peor es que no podías estar a su lado sin verte absorbido por su espiral autodestructiva.

Estamos en mi casa, Jaime acaba de llegar y no tiene hora de salida. Yo estoy totalmente aplatanado porque sí, y ni puedo ni quiero evitarlo. Los ojos de Jaime miraban viciosos y chispeantes el cubata que le acababa de servir, y luego me mira a mi de la misma forma, con una sonrisa diabólica:

-Bua! Tengo un hash...- deja la frase sin terminar, esperando mi reacción.

-Ajá

-Es que es casi como una bellota, pero cuesta como un ful normal. Y pega...Pega lo que no está escrito!

-Está bien

Jaime rebusca en su bolsillo un pequeño monedero, que abre y registra con dedos rápidos. Yo no puedo evitar dejar caer la cabeza en el sofá y suspirar. Por suerte Jaime no lo ve. Saca una piedrecilla del monedero y me la tiende como quién te deja sus órganos vitales.

-Es que míralo, que suave, que textura. Ya verás, quémalo un poco y huele. Huele!- Me pasa un mechero como quien pasa una pistola a un camarada mafioso para que haga el trabajo sucio.

Yo no sé si asustarme o enfadarme, así que hago lo que me dice, quemo la china y la huelo. Le devuelvo la piedra y el mechero. Jaime me mira con ojos expectantes aunque soberbios, seguro de mi respuesta.

-Huele bien.

-¿Huele bien? es la puta hostia! Tu no has fumado esto en tu vida.

-No, y a este ritmo me moriré antes de probarlo. Déjate de charla y hazte un porro.

Jaime se queda callado mirándome. Su cabeza va a mil por hora y sus ojos también. No me mira a mí, parece estar haciendo un listado mental de todos los objetos de la sala. Aparece su sonrisa maléfica y esta vez ofendida también.

-Eres un mierda. Paso de compartir esto contigo. - Se levanta, se bebe el cubata de un trago - Fumate tu orgullo, cabrón.

Jaime se va pegando un portazo. Yo me quedo tranquilo y con las ganas de haber probado esa materia.

 

 

el verano

Gerardo y yo nos encontrábamos en el chiringuito playero como cada noche. Nos sentábamos en las hamacas que miraban al mar, lejos de la música y de la posibilidad de ligarnos a una fémina. A esas horas del día ya habíamos renunciado a nosotros mismos. Nos sentábamos sin decir ni pensar más que en nuestra propio aburrimiento. Bebíamos claras de medio litro porque era una forma barata y sobretodo cuantiosa de beber sin emborracharnos seriamente. Queríamos ser conscientes de nuestra propia muerte.

Después de cinco minutos de silencio estrellado, Gerardo pegó un trago y dijo:

-Todo esta mierda es pá pillar no?

-El qué?

-Todo. La vida, el salir de noche. El que no nos hayamos tirado de un puente...es por pillar cacho no? Porque si no no entiendo que hacemos aquí...

-Joder, eso dice Schopenhauer. Yo me hubiera matado hace tiempo si no fuera porque tengo un ADN que repartir por ahí.

-...que triste.

-Ya ves...

Nos volvimos a quedar en silencio, mirando al cielo y fumando el cigarrillo mil. De fondo se oían las risas de un grupo de chicas y la música del chiringuito.

 

EL MES DE "AGUSTO"

EL MES DE "AGUSTO"

A gusto estoy retirado en la costa. CALOR. Chiringuito y playa. Día y noche. Mi cuerpo se ha vuelto inmune al gas, de tantas claras que he tomado. No se ha vuelto inmune a los bikinis y a las minifaldas que más bien parecen cinturones gruesos. Contra eso no hay vacuna. A menos que me la pille con la tapa del water si sigo abusando de las claras...

No más pensar en guiones, ni en planos, ni en dvd´s, ni en fregar los platos cada día... A la mieeeeerda. Aunque más bien me esfuerzo en disfrutar y en no pensar. Es muy fácil no ver la falta TOTAL de sentido de TODO mientras te bañas al sol, mientras haces deporte, mientras te pegas siestas de campeonato, mientras sales de copas, mientras no haces nada, etc. Son cosas que no he hecho este año(o eso creo), y que ahora hago con dedicación, casi con prisa. Yo mismo me otorgo un premio a mi esfuerzo, todo el mundo se otorga premios por su esfuerzo en verano (aún está por saberse el por qué de esto). 

Pero realmente estoy tapando ese poso, ese resto del curso (y de todos los años) que queda en mí, y que me dice que a menos que haga algo por distraerme, mi vista descubrirá el engaño de todo ("¿que coño de engaño?" direis vosotros con voz inocente, pero no sabeis mentir, ya sabeis a que me refiero.)

A menos que cada día coja pala y pico y me ponga a cavar en busca de una veta de Alegría, de Novedad, de Mujer, de Vida, de lo que sea....Cavando y cavando entre la roca negra que son los días, esperando no encontrar ese gas grisú que mata a los pájaros de mi mente silenciosamente, sin que yo me entere. Esa niebla gris que acaba por apagar las antorchas y linternas que me permiten seguir cavando. Cavando aunque sepa que el fin no está en encontrar la veta, ni en evitar el gas. Cavando sabiendo que el fin está en cavar. Pero una vez has visto brillar los minerales...

 

LO DEBIDO

Empiezo este artículo ante la página en blanco (el horror ah! el horror...) sin ningun tipo de idea, ni cosa que tenga que decir. No me siento inspirado para decir ni pensar nada. Pero hoy he abierto el blog, y me he visto obligado.

Obligado porque hace mucho que no escribo, obligado porque tengo que empezar a disciplinarme en cuanto al escribir, y en tercero (y no menos importante) es porque me ha parecido que faltaba algo, un final casi de ciclo, y ahora me doy cuenta que este blog al que acuden millones de personas en masa cada día (lo he escrito, jajaja, ahora ya está, ¿quién puede decir que no es así? Palabra de Blog...Amén) JODER!

Ejem...Problemas técnicos. Disculpen las molestias...Como íbamos diciendo, este blog al que acudo yo de vez en cuando y algun buen amigo (que probablemente se habría perdido) cumple ya un año más o menos, y creo que han habido huecos sin cerrar. Empecé el curso con la moral tocada, pero lo único que hize fué bajar y bajar más. Me sumergí yo mismo en ese tipo de estado de ánimo fundamentado en la rutina, en creer que los días transcurren lisos, grises, y lentos. Y empezar tu a volverte liso, gris y lento.

La rutina me parte en dos, me  eclaviza, me subyuga y me toca los cojones con las manos MUY frías. Me vuelvo un inútil mental y un déspota social, que sale a la vida solo cinco minutos y cree saber que coño se cuece en la olla, y me permito juzgarlo, y lo cato levemente con los labios y digo por sistema "ecs...no me gusta", por no estar acostumbrado al sabor de la vida, que tiene todos los sabores, sino al de "mi"  vida. Lisa, gris y lenta. O mejor sosa, insípida y pasada.

Solo he salido levemente del hoyo ahora en verano, escapando de mi madriguera y saliendo al exterior. Supongo que ahora no me importa tanto el porque de todo y estas, y tan solo quiero sitios nuevos, aire fresco y no saber que dia es ni que dias serán. Tan solo el intentar cerciorarse que el ciclo no se repita el año que viene, y ponerse a currar en lo que tiene que ser mi futuro inmediato que es escribir. Es por eso que se puede leer esto.

También considero que esta sección de "diario" que más bien es "mensuario" empezó con una historia bastante veraniega que no tuvo final, al menos no de forma clara. No es que ahora sienta la necesidad de hablar sobre ese viaje/s, ni porque siga pensando en esa persona de la misma manera, sino porque es un episodio que hasta ahora no he entendido lo suficiente como para hablar sobre él.

Fuí estúpido por creer que lo único que hacía falta ahí era mi presencia. Por el resto, no creo que deba echarme culpas o tristezas, puesto que no sentí que las cosas fueran bien en casi ningún momento, aunque los recuerdos son muy difusos ahora, y de todas maneras fué una prueba, que me ha dado experiencia, para bien o para mal...Lo único que realmente me corroe es es el que dos personas puedan sentirse tan unidas en ciertos momentos, y luego se esfumen, desaparezca cualquier rastro de ese pasado y se vuelvan desconocidos de toda la vida.

El pensar que ya nunca podrás saber de esa persona que pico tanto tu curiosidad.